Nos Desplazamos a Madrid para tomar el vuelo de Ryanair en el que nos venden de todo pero no regalan nada..para llegar a la ciudad imperial de Marrakech a las 5 de la tarde hora local.
El viaje de autobús desde Bilbao en un maravilloso "SUPRA" nos resulta cuanto menos tedioso, no realiza parada alguna y nos fríen como a pollos..
Llegamos a la capital dirección "Casa-Kumi" pero debido a una mala gestión horaria cortesía del Kumi, dormitamos en un portal frío y solitario de la calle Yarumal del barrio de Hortaleza.
Saldrán? se preguntaban...a las 8 y media de la mañana nos adentramos en la casa. Después de una visita de médico, la pequeña niña lloraba sin cesar,no quería ir a la escuela.
Una despedida y 3 horas de dormida en el sofá y partimos hacia Barajas con miedo de caer del pájaro de Metal... pero nada pasó, sanos y salvos llegamos al aeropuerto Menara de Marrakech, rellenamos la tarjeta de inmigrantes ilegales y cambiamos 150 euros en 1500 Dirhams,la moneda marroquí.
Empezaba la aventura!! El autobús dirección "Centre Ville" esperaba en una esquina, el "19", nuestro primer contacto con el mundo marrakechí.
Paisajes semidesérticos, palmeras, camellos, gente pintorescaa nuestros ojos, señores con chilaba parecidos al Yoda tomaban las calles.. y motos y motos y más motos.. y bicis y bicis y chicas con hijab y chicas con chilaba, señoras matriohkas y marroquies típical "Sanfran" y un potpurrí de guiris de todas las clases, colores y sabores, se daba un aire al sur de la peninsula..
Japoneses en calesas con mascarillas y no de Loreal...y un sinfín de personajes interesantes más.
Bajamos del autobús en la plaza Focauld en la medina, y ya venian los pesaditos, esos semi-guías que salían como cucarachas de todo rincón, eramos los típicos guiris aparbados con cara de dolar.
Mochila en espalda y chaqueta en mano, buscando un lugar donde dormir, Jemma-El-Fna sale borboteante a nuestro paso, no es una plaza, es una FIESSHHTA y una jungla de chilabas andantes con ancianos señores dentro, con esos zapatos roidos por el tiempo que les daba un aire de otra época. Una Hilera de puestecillos de zumo de naranja a 4 MAD asombró nuestros sentidos y deseosos de vitamina C nos acercamos...Montañas de frutos secos de todo tipo, sobre todo dátiles gigantes e higos..y señores que invitan a acercarnos a sus tiendecillas.
Corrillos de seres humanos se divertían con diversas artes callejeras.. Peleas de boxeo bereber, música Gnoua, banjos sonantes, serpientes danzantes, aguadores vestidos de rojo con sombreros coloridos que te piden monedillas a cambio de fotos, camellos con playeras que susurran en los callejones de los zocos y derbs: Hashh , Hasshh, Hashh.... guías espontáneos que te llevan al infierno y a las sinagogas del barrío judío y una mezcla de todo
Sin olvidar los puestos de comida improvisados que se montaban en medio de la plaza, llegaban montaban todo el chiringuito a eso de media tarde y luego después de una larga noche de captura de clientes, desaparecían poco más tarde de media noche como cenicienta, pero sin dejar rastro, para volver a empezar al día siguiente...
LA PLAZA LA PLAZA! Todos nos querían llevar a la plaza..a la que fuera! o si no a la tienda del primo y como última ofrenda lo que todos sabemos.(las piedritas filosofales)
Los "señores del agua"menudos son!hay que sacarles desprevenidos o te seguiran para que sueltes dirhams, es su modo de vida pero.. para eso ya estan los guiris :P Estos señores transportan el agua en una especie de odre de piel y la sirven en vasos a cambio de unos dirhams, parece ser que esta es una profesión que ha perdurado durante los años pero ahora ha quedado como algo simbólico y se dedican casi exclusivamente a sacarse fotos con los turistas y llevan unas chanclas muy bonitas de venta en cualquier zoco :)